dilluns, de juliol 16, 2007

Que la vida iba en serio (catarsis sabinista)

A mis diez y trece adolescente precoz
niño tardío con sangre de oferta
confecciono esas listas interminables
que convencen a algunos que valen la pena.

Hora de balance bienvenido desequilibrio
tanta vida en la tristeza tanto llanto en una sonrisa
le pido perdón al paraíso perdido por olvido
por pasión por más de cien mentiras malvendido.

La confianza no puede conjugarse de noche
ni perpetrarse a solas
Hago entonces pactos de silencio culpable
más vale desrecordar que esa boca es mía.

Turno de preguntas frontón neuronal
maquinando con versos el desenlace fatal
increpo al usuario de mi cama y de mi peine:

que no vaya a salir esta noche conmigo.

1 Comments:

Blogger República B612 said...

Le debo al sueño las vidas que gano
cuando salgo otra noche contigo
Me atrevo a decir que tu boca es mía.
¡Peor para el sol si al despertar se le olvida!
Recojo entre líneas esos giños
que escribimos a gritos en una barra
tristezas en negrita, risas con ginebra.
A tu lado comprendí que el lugar
que me hace llorar me enseña a vivir.
No te fusiles por querer definirte.
No vendas barato el valor de la duda.
Quien no anda nunca encuentra cruces.

6:05 p. m.  

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